El boom del auto-cuidado

¿Sabes que en la actualidad, una de las industrias - sí, industrias - con mayor crecimiento es la del auto-cuidado? Se trata de una tendencia cuyo fin es promocionar el bienestar personal para poder estar “al 100”, como dicen. Pero no se trata sólo de habladurías. En realidad, cuidarse a sí mismo no tiene nada de malo. De hecho, la ciencia dice que si uno está bien con uno mismo, posiblemente ese bienestar pueda permear en todo lo que nos rodea.

El auto-cuidado abarca muchos temas: no sólo se trata de verse bien, sino también de sentirse bien física y emocionalmente. Cuando te sientes bien con cómo te ves, se nota en ti un aire de confianza. Eso es bueno, sobre todo cuando tienes que proyectar una imagen positiva tanto ante empleados, como ante proveedores, clientes, y huéspedes.

Si no te sientes bien físicamente, o andas tristeando por algo que ocurre fuera del trabajo, también puede tener repercusiones en la oficina, aunque en teoría no tenga nada que ver una cosa con otra. Esto es un hecho comprobado: si no estás bien emocionalmente, es fácil que cometas errores: de juicio, operativos, de percepción. Así que no deseches la idea de cuidarte a ti mismo.

Si lo tuyo es leer, existen un sin fin de títulos de libros de auto-ayuda que buscan sacar lo más positivo de cada uno de nosotros. Algunos realmente son malos, pero existen autores formales que realmente saben de qué hablan. Para no errar, es mejor que revises las reseñas de quienes ya hayan leído algunos de los bestsellers, o hacer una búsqueda por autor.

Si más bien eres una persona de acción, también está comprobado que la actividad física levanta el ánimo y las defensas. Pertenecer a un gimnasio, practicar algún deporte, hacer yoga, o caminar en espacios abiertos son formas de fortalecer nuestra salud física, y que esto a su vez fortalece nuestra salud emocional.

La tendencia del auto-cuidado va a la alza, así que también puedes acceder a programas, aplicaciones y tácticas que ayudan a contrarrestar los efectos dañinos del estrés y que invitan a darnos un respiro.

Como una estrategia de relajación dentro de tu horario laboral, aquí te enlistamos unas sencillas actividades que puedes hacer dos veces al día, en tan sólo 5 minutos, para ayudarte a liberar tensión, incrementar tu concentración, y conectarte mejor con tu equipo de trabajo:

• Cambia tu mirada hacia un paisaje natural. Si llevas todo el día frente a una pantalla, voltea unos minutos hacia una ventana que ofrezca una visión distinta: tal vez árboles, montañas, nubes. Quédate ahí unos minutos y trata de concentrarte sólo en eso que ves. Si no tienes una vista, busca algún cuadro que te ofrezca algo similar.
• Concéntrate en tu respiración. Escucha como inhalas y exhalas. Hazlo lentamente, con tus ojos cerrados. Verás cómo sientes que el cuerpo se relaja. Estírate y muévete. Cuando llevas mucho tiempo en una misma posición, tu cuerpo lo resiente. Dáte una vuelta de cinco minutos en el exterior de tu oficina, preferentemente al aire libre. Parece poco, pero realmente es efectivo.
• Medita o practica mindfulness. Cierra tus ojos y trata de enfócate en el “aquí y ahora”. Intenta visualizar algo (por ejemplo las partes de tu cuerpo, o la manera en que se llenan tus pulmones de oxígeno) o trata de discernir los sonidos ambientales que percibes a tu alrededor (no voces).

De ser posible, procura que algunas de estas actividades formen parte de tu rutina diaria. Verás que con el tiempo, estas pequeñas prácticas de auto-cuidado te ayudarán a tener una visión más positiva, estar más alerta, tener una mejor disposición, y estar más conectado con la gente que te rodea. ¡A la larga, cuidarte a ti mismo es bueno para todo lo que forma parte de tu ecosistema!