Imagínate a un banco, un hospital o un despacho de contaduría que no pueda acceder a sus datos por una falla en la temperatura de sus servidores. ¿Qué imagen crees que proyectará a sus usuarios y clientes? Aunque no lo parezca, este tipo de errores pueden ser muy costosos para las empresas.
No te arriesgues, ¡mantén a tu operación en forma! La mejor manera de hacerlo es procurar que los equipos funcionen de manera adecuada, dentro de parámetros establecidos, a través de un sistema de monitoreo.
¿Cómo funciona?
Se realiza un análisis para programar las acciones necesarias en caso de fallas, para detectar pequeñas variaciones que se salen de rango y que marcan que algo requiere de atención. La implementación de sistemas sencillos que pueden medir dichas variaciones en los centros de datos son indispensables para alertar ANTES de que ocurra algún fallo.
¿Qué puede detectar un sistema de monitoreo?
-Cambios en la temperatura
Un aumento puede resultar en intermitencias, fallas en los equipos y pérdida de datos. Para lograr un rendimiento óptimo, la temperatura debe oscilar dentro del rango establecido como parámetro. Así también se logra un consumo responsable de energía, sin aumentar el gasto para mantener saludable al centro de datos.
-Potencia
El consumo de energía debe manejarse como una constante. Un aumento podría llevar a un sobreenfriamiento y a un alza en los gastos de operación.
-Niveles de humedad
Si la humedad es baja, aumenta el riesgo de descargas electrostáticas que pueden ser catastróficas para los componentes electrónicos. Por otra parte, la condensación y el exceso de humedad pueden provocar daños en drives y/o resultar en pérdida de información.
-Flujo de aire
Una falta de circulación de aire puede ocasionar que ciertas zonas aumenten su temperatura y ésto, a su vez, se puede convertir en un factor de riesgo para los componentes.
-Fugas de agua
Aires acondicionados descompuestos, tuberías rotas o goteras son sólo algunos ejemplos de situaciones que pueden llevar a una peligrosa acumulación de agua, que no es nada saludable para ningún equipo.
-Humo
Un indicador de sobrecalentamiento es el humo; éste también es importante monitorear para salvaguardar al data center de sobrecargas, incendios, etc.
-Seguridad
Un elemento importante es el acceso físico al centro de datos y quién está autorizado para transitar en esa zona.
En resumen, los sistemas de monitoreo no tienen que ser complicados. En realidad son fáciles de implementar y sus costos son razonables, pero lo más importante es que reducen gastos de reparación y mantenimiento, ayudan a extender la vida útil del equipo, y son esenciales para mantener al data center - y a toda la operación- en forma.
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